El pasado 31 de marzo, los jóvenes atendidos en el Programa de Inclusión Educativa y Prevención del Abandono Escolar, iniciativa desarrollada en Santander y Torrelavega, dependiente de la Consejería de Educación, Formación Profesional y Turismo del Gobierno de Cantabria y gestionada por Fundación Diagrama, realizaron una ruta para descubrir el entorno natural y la historia de los municipios próximos a la ciudad de Santander.
La jornada, llevada a cabo con las medidas de seguridad, higiene y distanciamiento social establecidas por las autoridades sanitarias, se inició en la localidad de El Astillero, desde donde los usuarios comenzaron un trayecto a pie atravesando la ría de Solía por un antiguo puente ferroviario restaurado, considerado como parte de la arqueología industrial de Cantabria, y que permite unir al citado municipio con el de Villaescusa. A lo largo de este recorrido que sigue el abandonado trazado del ferrocarril que unía Obregón y El Astillero durante los siglos XIX y XX, los menores pudieron conocer las actividades mineras y extractivas de la zona, así como las edificaciones destinadas al mantenimiento y suministro del ferrocarril y a las operaciones de cribado y limpieza de los materiales que transportaban.
El final de la ruta tuvo lugar en la localidad de Liaño, desde donde los jóvenes pudieron apreciar con mayor perspectiva el recorrido que habían completado, así como algunos de los elementos geográficos más característicos de la Bahía de Santander, como la Sierra de Gándara con el Pico Peña Cabarga o las Marismas Blancas y Negras de El Astillero. En definitiva, esta iniciativa supuso un importante refuerzo para el sentimiento de pertenencia de los menores, resultando además muy positivo para su cohesión grupal y adquisición de hábitos de vida saludable.