Los menores del Aula Socioeducativa de Atención a la Diversidad y del programa de Currículo Adaptado en Aula Externa para la Prevención del Abandono Escolar, dependientes de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria y gestionados por Fundación Diagrama, participaron en tres talleres de sensibilización medioambiental centrados en la utilización del agua, el cambio climático y la movilidad sostenible.
Los pasados días 30 de mayo y 6 y 13 de junio, un grupo de jóvenes del programa de Currículo Adaptado en Aula Externa para la Prevención del Abandono Escolar, del Aula Socioeducativa de Atención a la Diversidad y del Programa de Cualificación Profesional Inicial (PCPI) de Ayudante Técnico en Cocina, que desarrolla Fundación Diagrama en Cantabria, visitaron el centro ambiental ‘Los Viveros’, en Santander. Esta visita está enmarcada en el ciclo de actividades de sensibilización que se han realizado en estos recursos con motivo del Día Internacional del Medio Ambiente.
El centro ambiental ‘Los Viveros’ es una iniciativa del Ayuntamiento de Santander que busca dar respuesta a las necesidades formativas en materia ambiental de la población local. El centro ofrece una serie de programas de divulgación, investigación y formación ecológica destinadas a impulsar el desarrollo sostenible. Entre sus objetivos está el fomento de comportamientos responsables con el entorno social, cultural y natural. El tema de la primera visita realizada a este lugar, fue el agua, incidiendo especialmente sobre la importancia de llevar a cabo una gestión sostenible de los recursos hídricos. En torno a este tema se realizó un ejercicio práctico en el que los menores elaboraron filtros de agua con material reciclado.
En la segunda visita se realizó el taller ‘La energía mueve tu mundo’, en el que se abordó el tema del cambio climático. La sesión tuvo como objetivo dar a conocer las energías sostenibles y llamar la atención sobre las consecuencias del excesivo consumo energético. En el terreno práctico, los jóvenes aprendieron a fabricar hornos solares. La última sesión se centró en la movilidad sostenible, poniendo de manifiesto la necesidad de utilizar energías alternativas y no contaminantes para realizar desplazamientos. En el taller se llevaron a cabo varios experimentos eléctricos, como realizar circuitos con placas solares, conseguir energía eléctrica partiendo de un limón y dos placas metálicas, y elaborar un motor eléctrico.
Esta actividad ha permitido a los jóvenes ampliar sus conocimientos sobre el medio ambiente y concienciarse sobre la necesidad de cuidar el ecosistema y los recursos naturales frente a la contaminación y el derroche, aprendiendo además las numerosas aplicaciones que tienen estos conocimientos en distintos ámbitos.