El acto, convocado por la Consellería de Justicia y Bienestar Social, estuvo presidido por el president de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, que señaló que la reeducación y reinserción social de los menores que cumplen una medida judicial, “es una labor de todos”, que debe tener el objetivo de la “plena integración”, sin que se produzcan exclusiones.
El pasado 31 de enero, tuvo lugar en Alicante, la entrega de los Premios ‘Raquel Payá’, en la que se premiaron los progresos realizados por un menor del Centro de Reeducación ‘Pi i Margall’ de Burjassot (Valencia), dependiente de la Consellería de Justicia y Bienestar Social de la Generalitat Valenciana y gestionado por Fundación Diagrama. Estos galardones, reconocen públicamente a los menores que, en cumplimiento de su medida judicial, se han distinguido por su espíritu de superación y constancia.
El joven, que estuvo acompañado por sus compañeros -dos de lo cuales resultaron finalistas- y los profesionales que les atienden en el centro, se mostró emocionado por los efusivos aplausos y las muestras de afecto recibidas. Al recoger el diploma, expresó su intención de “enmarcarlo”, y dijo sentirse “muy orgulloso”, comentando que el ordenador portátil que recibió junto al premio le servirá para “escribir mis relatos y quién sabe si mi primera novela”.
La figura que simboliza este premio, es un trencadís –mosaico elaborado con fragmentos cerámicos- realizado por los menores del Centro de Reeducación Pi Gros de Castellón, dependiente de la Consellería de Justicia y Bienestar Social valenciana y gestionado por Fundación Diagrama.
Según expresaron los propios menores, este tipo de actuaciones aportan mayor solidez al proceso educativo que siguen, sintiendo el reconocimiento a los progresos experimentados, y siendo alentados a seguir avanzando y recorriendo el camino de superación personal emprendido.