Un grupo de menores del centro educativo ‘Virgen de Valvanera’, dependiente de la Consejería de Presidencia y Justicia del Gobierno de La Rioja y gestionado por Fundación Diagrama, han cursado el taller de comunicación emocional ‘Exprésate’, en el que han desarrollado sus habilidades para transmitir de forma equilibrada sus sentimientos. A la clausura del curso acudió el consejero Emilio del Río y la directora general de Justicia e Interior, Cristina Maiso.
El pasado 24 de abril tuvo lugar la clausura del taller socioeducativo ‘Exprésate’, en el que han participado seis menores atendidos en el centro ‘Virgen de Valvanera’ de Logroño (La Rioja). El programa educativo tenía como objetivo que los jóvenes adquiriesen las herramientas, técnicas y habilidades adecuadas para comunicar sus emociones y pensamientos, así como para comprenderlos y manejarlos de manera equilibrada. La actividad, diseñada por una alumna de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad de La Rioja que realizaba sus prácticas en el centro con la colaboración y la supervisión del equipo educativo, ha tenido un resultado muy positivo.
La intervención desarrollada en el taller empleaba diversas técnicas, como el role-playing, la escritura, la expresión verbal en público, el trabajo en grupo, la representación teatral para combatir el miedo escénico o la improvisación, siguiendo un itinerario con varias temáticas en las que se planteaban metas individuales. De esta forma, mediante el esfuerzo por lograr estos objetivos personales, los jóvenes podían adquirir de forma indirecta un repertorio de métodos y habilidades sociales, además de desarrollar los aspectos cognitivos del manejo de emociones. Asimismo, se trabajaron diferentes técnicas de desinhibición y relajación, elaborando además los decorados, vestuario y complementos necesarios para el desarrollo del taller.
Al acto de clausura de esta actividad acudieron el consejero de Presidencia y Justicia de La Rioja, Emilio del Río, y la directora general de Justicia e Interior, Cristina Maiso. Durante el mismo, los educadores y los menores quisieron agradecer su labor a la estudiante de Trabajo Social Cristina Cabezón, haciéndole entrega de un mosaico decorativo realizado por los chicos en uno de los talleres ocupacionales desarrollados en el centro.
Este taller ha contribuido al proceso de integración social de los jóvenes participantes, ya que en él han aprendido a superar situaciones que les producen ansiedad y a enfrentarse a circunstancias nuevas o desconocidas de manera más equilibrada, comunicando sus emociones y buscando herramientas para manejarlas. Asimismo, destaca el interés y compromiso mostrados por los chicos y el vínculo de confianza que se ha desarrollado entre ellos.