Los menores del centro ‘Virgen de Valvanera’ de Logroño ayudan a practicar deporte a personas con discapacidad

Durante todo este año, los menores del centro educativo ‘Virgen de Valvanera’, situado en Logroño, han colaborado como voluntarios en las actividades organizadas por la Asociación Riojana de Deporte Para Todos, dedicada a acercar distintas disciplinas deportivas a personas con discapacidad y a adaptarlas a sus condiciones particulares. Los jóvenes ejercieron de auxiliares en el deporte paralímpico de pelota llamado boccia y jugaron contra deportistas en silla de ruedas del equipo de baloncesto del centro de recuperación de personas con discapacidad física de Lardero, entre otras tareas.

Además, como parte de las actividades de concienciación sobre las dificultades a las que se enfrentan las personas con discapacidad, los menores visitaron la unidad de Lardero donde los usuarios desarrollan su vida cotidiana, comprobando las técnicas adaptadas que emplean para realizar actos tan sencillos como cepillarse los dientes, manejar un teclado o hacer la cama. Asimismo, varios deportistas con discapacidad (entre ellos Juan José Rodríguez Díez, número 3 de España de tenis en silla; y Sandra Peña Cortés, cuatro veces campeona de España de boccia) visitaron el centro de Fundación Diagrama para ofrecer charlas sobre discapacidad. En ellas contaron sus experiencias vitales, como la de participar en las Paraolimpiadas de Londres 2012, y compartieron con menores y profesionales su trayectoria en el mundo del deporte, explicándoles cómo su evolución personal ha ido de la mano con sus logros deportivos.

Las charlas y el voluntariado deportivo sirvieron de colofón a la programación cultural del centro dedicada a las personas con discapacidad, que incluyó películas relacionadas con este tema, juegos de deporte adaptado (rugby, baloncesto, fútbol o voleibol en silla, deportes de ciegos…) o la realización de actividades cotidianas en silla de ruedas. Esta fue la parte práctica de un conjunto de sesiones orientadas a sensibilizar a los menores sobre discapacidad, ayudándoles a conocer los problemas que encuentran estas personas en su vida diaria, motivándoles a participar en actividades de ayuda a los demás, desarrollando su empatía a través del juego y concienciándoles de los peligros de los accidentes de tráfico. Los jóvenes se implicaron en las actividades y mostraron una gran cercanía hacia las personas que colaboraron en ellas, comprobando la importancia de eliminar barreras que puedan limitar su capacidad para llevar una vida plena y satisfactoria.