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Los pasados días 24 y 25 de abril, un grupo de jóvenes atendidos en el centro educativo ‘Arrui Alea’, dependiente de la Consejería de Sanidad y Política Social del Gobierno de la Región de Murcia y gestionado por Fundación Diagrama, tomaron parte en un taller de prevención en el ámbito de la salud impartido por educadores del hogar. El curso giró en torno al consumo de tabaco entre los menores de edad, y tuvo como objetivo aumentar la percepción de riesgo del tabaquismo en los jóvenes, concienciándoles sobre las ventajas de llevar una vida sana y no ceder a influencias sociales que pueden ser perjudiciales para su salud.

Gracias a un convenio firmado el 30 de mayo con Fundación La Caixa, Fundación Diagrama llevará a cabo el Programa de Estimulación de Emociones Positivas ‘Vivo, Mundo Creativo’ en la residencia de mayores ‘Nuevo Azahar’ de Archena (Murcia), que dispone de plazas privadas y de plazas públicas concertadas con la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales del Gobierno de la Región de Murcia. La iniciativa, que se llevará a cabo entre los meses de septiembre y diciembre, tiene como objetivo mejorar la salud y el bienestar de los residentes a través de dinámicas de grupo que estimulen las relaciones sociales y la satisfacción personal.

El pasado 16 de mayo, el equipo de la residencia ‘Nuestra Señora de Cortes’ reunió en las instalaciones de este centro sociosanitario a diferentes asociaciones de la localidad de Alcaraz (Albacete), en concreto la Asociación de Amas de Casa, Asociación de Jubilados y la Asociación de Voluntarios de la zona. El objetivo de la visita era darles a conocer las diferentes actividades que se realizan con las personas mayores en la residencia de Fundación Diagrama, que dispone de plazas privadas y plazas concertadas con la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales del Gobierno de Castilla-La Mancha.

El director de la residencia y una representación de trabajadores y usuarios guiaron a los asistentes por las instalaciones del centro. Durante la visita, pudieron hablar con los mayores atendidos y participar junto a ellos en diferentes actividades tradicionales, como cartas, dominó, música y baile. Una vez terminado el recorrido, se les invito a una merienda junto a los residentes del centro.

El pasado 29 de abril, la residencia ‘María de la Paz’ de Fundación Diagrama, ubicada en Nerva (Huelva), inauguró un nuevo recurso que permitirá a los profesionales del centro mejorar la atención integral de las personas que residen en él: el Aula de Informática para Mayores. Esta iniciativa tiene como objetivo que los residentes tomen contacto con las nuevas tecnologías y se familiaricen con los equipos informáticos, aprendiendo su uso básico y las distintas herramientas que pueden utilizar.

A través de este programa, organizado por el equipo de terapeutas ocupacionales del centro, se busca fomentar la motivación de las personas mayores, su normalización en la vida cotidiana de la sociedad y la mejora de sus relaciones sociales, así como estimular las capacidades sensoriales, cognitivas y de memoria de los residentes. Asimismo, la navegación por internet permitirá acercar a los usuarios a imágenes y recuerdos de sus lugares de origen, información sobre sus municipios y sus aficiones, e incluso establecer nuevos vínculos de comunicación con sus familiares.

Más de 40 niños y adolescentes de Sandiara (Senegal) recibieron cursos de Iniciación a la Informática impartidos por la asociación Diante Bou Bess, contraparte senegalesa de Fundación Diagrama, y además tuvieron acceso a 12 nuevos ordenadores portátiles en el Centro Polivalente de Formación (CPF) situado en esta localidad. Este proyecto fue posible gracias a la financiación de la Junta de Andalucía y los ayuntamientos de Torrelavega y Reinosa (Cantabria).

En concreto, 20 estudiantes de enseñanzas medias (entre 12 y 16 años) se formaron en Windows XP y Microsoft Office gracias a la colaboración de la Junta, que además hizo posible la adquisición de cinco nuevos portátiles para garantizar el mayor aprovechamiento de las clases por parte de los alumnos.

Con las aportaciones de los ayuntamientos cántabros se completó el equipamiento de las aulas con otros siete portátiles y se amplió la formación a una veintena de niños de entre 10 y 12 años, que disfrutaron y aprendieron mucho en su primer contacto con la informática.